El Fingabol se inspira en un juego muy popular en Brasil, el "Futebol de Prego". Una mezcla de billar y futbolín, este juego sorprendente y creativo se juega con los dedos y un disco para marcar goles. Ven a descubrirlo en el WhiteFields Café, en Cesson-Sévigné, cerca de Rennes, donde se celebrará un torneo.
Fingabol, un juego sencillo y cautivador
El juego se basa en un tablero de madera maciza lacado y serigrafiado, equipado con piezas de acero inoxidable que representan a los 22 jugadores. Se juega con dos personas, una ficha de aluminio con aro de goma llamada bocha y dedos ágiles. El campo, con las líneas de gol marcadas, garantiza un deslizamiento perfecto.
El saque inicial se realiza en el centro de un círculo central y los jugadores disparan al bowl para anotar en el campo contrario. Se anota un punto cuando el bowl toca el interior de la portería y se deben anotar 5 puntos para ganar. Si el bowl sale fuera de los límites del campo, el oponente lo vuelve a poner en juego disparando desde su línea defensiva.
Los jugadores deben aprender a dominar y calcular trayectorias, y a usar todos los apoyos, bordes de la cancha y jugadores para rebotar. Disfrutan de este emocionante cara a cara, aunque les cueste tiempo adquirir agilidad y precisión.
Fingabol, un juego 100 % hecho en Francia, es todo un éxito entre los aficionados a los juegos de habilidad. Un fenómeno comparable al del futbolín y en constante crecimiento.
